sábado, 8 de agosto de 2020

Fanfic de Ed Edd y Eddy que escribi cuando tenia 14 (a lo wattpad)

 

La amistad es un hilo.  Por muy separados que dos personas esten, siguen unidos por ese hilo. Pero algunas veces pensamos que ese hilo es fino cuando esta mas fuerte, y otras veces pensamos que se mantiene estable cuando, en realidad, nunca hubo intenciones de existir.

La ultima aventura fue despues de un largo viaje, donde porfin todos se reconciliaron y se hicieron amigos. Todos menos uno, ageno a todo como casi siempre, que despues de una paliza juro venganza, aunque finalmente tambien se soluciono.

De eso hace ya 10 años, la ultima vez que los vio, con 13 años, fue en su mudanza por cosas del trabajo de sus padres. No pudo disfrutar mucho tiempo de estar con sus nuevos amigos. Ahora los iba a volver a ver, 10 años despues, ya que el personaje tendria que empezar la universidad.

Sentado en el asiento trasero del coche, mirando por la ventanilla aquella vieja ciudad que no visitaba muy amenudo dirigiendose al antiguo barrio, se pregunto como serie cuando volviera. ¿les reconoceria?¿se acordaran de mi?¿mis mejores amigos se seguirian metiendo en problemas? y sobre todo?¿habran cambiado? Esa pregunta obtuvo respuesta cuando el coche pego un frenazo, sacandolo de sus pensamientos. Estaban entrando al barrio cuando algo se les cruzo por delante. Sus padres se asustaron al creer escuchar un "beeh", sin embargo, el estuvo tranquilo, como si le pareciera totalmente normal, incluso sonrio cuando vio al dueño del animal, un chico alto y moreno de pelo azulado, con un notable acento estrangero que escucharon cuando saco de la carretera el animal y empezo a regañarle. Definitivamente, y despues de 10 años, no ha cambiado absolutamente nada.

Al salir del coche se metio rapidamente en su anterior casa. No queria que nadie le viera. Mientras sus padres metian las cajas y el desempaquetaba las cosas se iba haciendo de noche. Con la mochila llena de libros, se dispuso a ir a dejar las cosas en la universidad, pero primero sentia que debia de hacer algo.

La universidad, que formaba parte de su antiguo instituto, estaba en la parte de un pequeño barranco, donde desde uno de sus grandes balcones cubierto por un pequeño bosquecillo que creaba justo en el centro un ancho camino de piedra que llevaba al borde se podia ver el barrio, el bosque y el basurero. Entro al balcon por una puerta trasera, queria evitar encontrarse con alguien antes. Mientras pasaba por los arboles vio en el camino la sombra de alguien que se acercaba. Se escondio detras de un grueso arbol y vio a la chica que pasaba. Recordaba aquella hermosa rubia, lo tierna que habia sido siempre con ellos, en especial cuando todos se hicieron amigos. Contemplo como aquella chica se iba disgustada a la puerta principal al balcon, donde un chico tambien conocido la esperaba con una bicicleta y un bate de beisbol. Podria ir hacia ellos, saludarles, preguntarles como fue todo y todo lo que le paso y, quiza, podrian ir a buscar a los demas para jugar todos juntos a algo, como de pequeños solian hacer. Pero no lo hizo, primero debia ver a aquellas dos personas que tanto queria. Cuando la rubia le conto al chico algo y escucho esos dos nombres que tanto esperaba volver a oir, estuvo seguro de que hacer. Cuando ambos entraron a clase, el fue a ver a esas dos personas. Y las vio. Uno de ellos era un chico alto con una larga chaqueta verde y el pelo mas largo de lo que lo recordaba, color castaño y peinado hacia la frente. Estaba inclinado hacia delante con los brazos apoyados al muro. Los tenues rayos de sol que conseguian pasar a traves de las nubes doradas se las tapaba aquel chico, haciendo una larga sombra que tapaba al protagonista. Al lado suyo, otro chico mas bajo y delgado, con apariencia de ser bastante debilucho, con una chaqueta de algodon marron y un gorro negro del que salia una pequeña melena negra. Tenia un brazo apoyado en la espalda de su amigo, como reconfortandole. Ambos estaban mirando el barrio y no se dieron cuenta de su presencia. Se quedo imovil, como cuando solian ver peliculas de miedo y un susto le paralizaba contra el asiento, o mas bien como cuando se metieron en ese gran problema que les obligo dar el gran viaje que al final acabo todo perfecto. Le pasaron unas lagrimas por la mejilla y su rostro le dolia cuando sus labios estuvieron devatiendo entre estar triste o sonreir. Se quedo mirandoles en silencio, recordando todo lo que pasaron juntos, sus conflictos y sus mejores momentos, y recordo la ultima vez que se vieron. El alto castaño le habia dado el mejor dibujo que habia echo y que ahora tenia enmarcado al lado de su cama donde es mas visible. Del otro chico le hubiera gustado despedirse, pero no pudo. Mientras pensaba esto, no se dio cuenta de que la mochila se le estaba arrastrando por la espalda hasta caer al suelo haciendo un ruido que llamo la atencion de los muchachos. Los dos se giraron al mismo tiempo y le miraron, el alto con los ojos empañados y una emocion contenida. En unos segundos, intento buscar algun cambio en ellos, pero sus intentos fueron fallidos. Finalmente, fue aquel alto castaño quien irrumpio el silencio, desatando su emocion contenida. Pego un gran salto estirando los brazon y se veian los chorros de lagrimas que salieron repentinamente.

-¡¡¡EDDY!!!-Grito, provocando eco en todo el lugar. Y en apenas lo que tardaba en volver a posar los pies en el suelo ya estaba ahi, abrazandole, o mas bien, ahogandole contra su pecho. A Eddy no le quedaban fuerzas para devolverle el abrazo, pero, a pesar de todo, le abrazo. Ed, aun con Eddy en brazos, empezo a dar saltos de alegria y a rodar en el suelo. Cuando al fin pudo levantarse, hubo algo que le extraño. Solo estaba Ed con el. Este empezo a contarle todo lo sucedido con gestos demasiado exagerados y liandose en cada palabra diciendo "dijo entonces y" en vez de "y entonces dijo" y en otras cosas, pero Eddy le entendia bien.

-...y fue cuando... ¡¡AAH!! ¡Eddy, no me puedo creer que estes realmente aqui! ¡Vamos a hacerte una fiesta de bienvenida!

-¡Eso suena genial, Ed!-Se interrumpio al darse cuenta de algo-Pero ahora mismo tengo que hacer algo-dijo en voz baja, casi en un susurro. No pudo evitar torcer la vista por una milesima de segundo en una sombra que habia detras. Ed se quedo pensando un rato. Luego sonrio.

-Entiendo-No se lo podia creer. ¿Ed?¿entendio?¿A LA PRIMERA?-Entonces ire a avisar a los demas.-Y se fue corriendo.

Solo quedaban el y su otro amigo, Edd. Se sorprendio un poco pero siquiera hizo gesto de curiosidad. Simplemente se quedo ahi, apoyado contra el muro, con las manos en los bolsillos. Ahora mismo, Eddy Su expresion no decia nada, ni que estuviera feliz, ni triste, ni furioso, nada. Se quedaron mirando el uno al otro, como esperando algun movimiento. Solo se escuchaba la brisa, que rozaba moviendo las nubes y el pelo de ambos.

-¿Y bien?